El cortometraje “Una buena tarde para morir” que trata sobre la violencia intrafamiliar, fue el trabajo final de taller de Creación Audiovisual y Cine realizado en el marco del Programa “Quiero Mi Barrio” Bonilla.

Con la presentación de manera interna del primer montaje del cortometraje “Una buena tarde para morir”, culminó este martes el Taller de Creación Audiovisual y Cine realizado por todo el mes de agosto en el barrio Bonilla.

Taller que se realizó en el marco de las actividades del Programa “Quiero Mi Barrio” que ejecuta el Ministerio de Vivienda y Urbanismo en conjunto con la Municipalidad de Ancud en el barrio Bonilla.

Los doce jóvenes realizadores que participaron del taller, se auto denominaron como la productora El Tepual, produciendo la pieza audiovisual de inicio a fin, desde la idea original, la escritura del guión, actuación y grabación del mismo.

Así lo sostuvo uno de sus participantes, José Miguel González, quien señaló la importancia del intercambio generacional para la realización de este trabajo que incluyo la creación de la historia, “fue bonito porque fue una idea que salio de todos” dijo.

Taller que fue una experiencia “súper positiva” como sostuvo Xiomara Piña, una de las participantes, señalando que “fue algo nuevo. Nunca había visto el análisis de cortometrajes, de trabajar los aspectos de cómo se forma un cortometraje y las películas en general”.

Apreciación que también compartió Andrés Rehbein, quien además de conocer técnicas nueva en cámara, encontró entretenida la convivencia entre todos “porque al final fue un trabajo grupal que terminó en un resultado que fue el cortometraje y nos quedó hermoso” expresó el joven.

Taller que se realizó en el Centro Comunitario del Barrio Bonilla, ocupando como locaciones de grabación el cerro Hueihuén, y laderas del sector de Vista Hermosa y San Valentín. En ese sentido, Igor Viveros, cineasta y monitor del taller, realizó una evaluación positiva de la actividad, valorando que el Programa “Quiero Mi Barrio” da la posibilidad de “juntarnos, de hacer cine en una población, de darle color a la población, al barrio”.

Cortometraje de diez minutos trata sobre la problemática de violencia intrafamiliar, el cual próximamente será presentado ante la comunidad después de su proceso final de edición. Trabajo, acompañado de un making off que hace seguimiento al proceso, posteriormente se presentará a concursos nacionales de cine y donde se mostrará el talento de estos jóvenes y los parajes del barrio Bonilla en la pantalla grande.